martes, 24 de noviembre de 2009

MAGRO DE CERDO CON TOMATE



Para escuchar mientras lees: Sueño (Greta y los Garbo)


Hemos decidido dejar de fumar.

Tenemos muchos motivos ahora mismo para que esto siga hacia delante. Lo estamos intentando con fuerza de voluntad, simplemente con eso, pero si vemos que no es suficiente tendremos que tomar otras medidas.

Cuando decides dar este paso, te das cuenta de lo esclavos que somos del dichoso cigarro. Si fuéramos capaces de fumar uno al día con el cafecito de la sobremesa y olvidarnos de todos los demás sería (para un fumador) maravilloso!!. Pero es imposible, detrás de uno viene otro y otro por ser fiesta y otro por que estoy nervioso, y otro por que no sé que hacer mientras espero el bus...
Las personas que nunca han fumado, no entienden a veces que este proceso es muy duro, no entienden que tu cuerpo y tu cerebro son los que necesitan esa sustancia diaria, y aunque a veces luches contra todo lo que tu mente planea para hacerte coger otro cigarro, es imposible y caes en la misma rutina.
Hemos de tomarnos las recaídas como algo de lo que hay que aprender, y no por eso no volver a intentarlo. Dicen que un ex-fumador seguirá teniendo ganas de fumar toda su vida y eso es lo que al principio te desanima bastante, ya que el esfuerzo que haces hoy tendrás que hacerlo todos los días. ¿Tendremos fuerzas durante tanto tiempo? No lo sabemos pero tenemos que intentarlo y si alguna vez nos da por tirar la toalla, volveremos a recogerla y comenzar el segundo round.

Buena suerte a todos los que lo estáis intentando. Enhorabuena a los que lo consiguieron. A los que fuman...me pasáis un cigarrito?? Jajajaja es broma.




Dificultad: Media
Personas: 2
Tiempo:30-40 min
  • 1/2 Kg carne magra de cerdo 
  • 1/4 pimiento verde
  • 1/4 pimiento rojo 
  • 1/2 cebolla pequeña
  • 500cc tomate triturado
  • 1/4 vaso vino blanco
  • Sal, Pimienta
  • Aceite
Ingrediente esencial: La fuerza de voluntad unida a tus importantes razones te ayudarán en esta lucha.
  1. Cortamos en trozos pequeños la carne . Salpimentamos.
  2. En una cacerola ponemos un poco de aceite, cuando esté caliente echamos la carne. Sin parar de mover hasta que cambie de color, y se dore mínimamente.
  3. Sacamos la carne y la reservamos.
  4. Picamos toda la verdura.
  5. En la misma cacerola echamos la verdura y rehogamos.
  6. Cuando esté la verdura blandita echamos el vino blanco , dejamos que reduzca un par de minutos y agregamos el tomate triturado.
  7. Movemos y agregamos la carne. Bajamos el fuego a la mitad y dejamos cocer con la cacerola tapada y moviendo de vez en cuando durante 30-40 minutos a fuego medio. Probar de sal y rectificar si fuera necesario.
  8. Si probáis  la carne y está  dura, agregar un poco de agua y dejar cocer más tiempo. 
  9. Cuando reduzca el agua probar de nuevo y si sigue dura repetir el paso anterior.
  10. Servir con buenos trozos de pan!



lunes, 23 de noviembre de 2009

RAVIOLI RELLENOS DE SETAS DEL BOSQUE CON SALSA DE NUECES

Para escuchar mientras lees: Aperitivo de las doce (Pastora)


Cuando el domingo llamé a mi madre para saber que tal estaba me preguntó:

- ¿Qué habéis comido hija?
- Ravioli rellenos de setas del bosque con salsa de nueces.
- Hija que sofisticado suena eso - y las dos comenzamos a reir.

Recuerdo el día que mi jefe me dio un menú de uno de sus restaurantes , para pasar a formato word. En éste ponía así:

"Caviar de campo al ibérico con tubérculos confitados"

Yo me quedé loca con este plato, mi cabeza no paraba de dar vueltas   e imaginar de que  estaría hecha esta receta. Comenzaba a salivar, deseaba ir ese día al restaurante para saborear tal experimento. Mi jefe volvió a mi despacho y me dijo:

- Este cocinero pone unos nombrecitos a los platos ... ¡Madre mía! Cuando la gente lo pida y vea lo que es...lo devuelve.
Intrigada miré a mi jefe y pregunté - Pero...¿Qué es lo que es?

- Pues huevos fritos con jamón serrano y patatas fritas.

(Para mi, pensé, igual de rico)

Así que lo que parece tan sofisticado, como me dijo mi madre en este caso , no tiene más  que 20 minutos máximo de preparación. Claro que  yo compré los raviolis ya rellenos y listos para cocer.
Cuando tenga tiempo de hacer la pasta y sus rellenos en casa ya estaremos hablando en otro nivel jeje.

RAVIOLI RELLENOS DE SETAS DEL BOSQUE CON SALSA DE NUECES
 Dificultad: Mínima
Personas: 2-3
Tiempo: 20 min.
  • 250 gr de ravioli rellenos de setas ( Yo compré la marca Rana)
  • 250 ml nata líquida cocinar
  • 25 gr nueces peladas
  • Sal, pimienta, sazonador de pasta(especias especiales para dar más sabor)
  • Aceite Oliva
Ingrediente esencial: Rico y sencillo, dos veces bueno.


  1. Ponemos una cacerola con agua, sal y un poco de sazonador de pasta al fuego. 
  2. Cuando rompa a hervir echamos los ravioli dejando cocer 4-5 min. No más que se pasa la pasta.
  3. Retiramos con un escurridor y servimos en el plato.
  4. En un mortero ponemos las nueces peladas. Machacamos bien.
  5. Ponemos una sartén al fuego con una gota de aceite. Echamos las nueces, que queden sueltas, la nata, sal y pimienta. 
  6. Dejamos que espese un poco y servir la salsa encima de la pasta.
  7. Succulento, squisito, gustoso!

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ALBÓNDIGAS DE PATATA Y BACALAO (abuelilla)



Para escuchar mientras lees No me doy por vencido (Luis Fonsi)


Juro que vale la pena, esperar y esperar, esperar un suspiro...No me canso, no me rindo, no me doy por vencido.
La semana pasada pasé por un amargo momento, que ya veía venir desde hace un año aproximadamente. La vida de la madre de una de mis mejores amigas, la que mantengo desde la infancia se paró el día 17 a las nueve de la noche. Padecía esa enfermedad que da miedo hasta nombrar. Esa enfermedad que cuando se detecta a veces sólo queda la esperanza de estar entre tantos miles de personas que se salvan. Viví un momento duró, mi capacidad de consolar se veía pequeña ante tal situación y sólo podía pensar que mi amiga, esa chica fuerte, que estaba más entera que cualquiera de los que llegábamos, empezaba un camino nuevo en su vida. Este sólo era el comienzo de todo lo que se venía encima.
En ese momento me vino una frase de mi madre a la cabeza: "que no nos dé Dios todo lo que podamos soportar"
Y es totalmente cierto, ya que tal y como dicen nadie se muere por nadie, pero el que se muere se lleva gran parte de ti, de tus recuerdos, de tus confidencias, de tu apoyo. de tu alegría.
Yo sólo pido lo mismo que mi madre, y si no fuera así, espero tener fuerzas y no darme por vencida.
Tere , te quiero.

Dificultad: Media
Personas: 4
Tiempo: 1 h.

  • 4 patatas medianas
  • 150 gr bacalao desalado
  • 2 huevos
  • 1/2 cebolla
  • Perejil
  • Harina
  • Sal
  • Aceite

Esta receta es de mi abuelilla, ella no pone cebolla, pero me gusta ya que así quedan más jugosas.
¿Os acordáis de la receta de tortilla en salsa? Pues estas albóndigas las podéis con la misma salsa que os expliqué.

Ingrediente secreto: Fuerza y cariño para seguir adelante día tras día.

Ingrediente esencial: Saber que la vida te ofrece situaciones incomprensibles, para poderlas comprender cuando lleguen aunque el sufrimiento sea el mismo.
  1. Lavamos las patatas para eliminar cualquier resto de tierra o suciedad. Llenamos una cacerola con agua, echamos un poco de sal y metemos las patatas. Tapamos y a fuego medio dejamos cocer unos 25 minutos hasta que la piel se abra ligeramente. Sacamos las patatas y las metemos en un bol con agua fría.
  2. Pelamos las patatas y desmenuzamos con las manos. (no demasiado, que queden trocitos )
  3. Picamos el bacalao y la media cebolla. Rehogamos unos minutos y agregamos a las patatas.
  4. Batimos los dos huevos, con un poco de perejil y un poquito de sal. Añadimos esta mezcla a lo anterior.
  5. Mezclamos todo bien con las manos. Tapamos y dejamos reposar unos 10 minutos .
  6. En una bandeja ponemos harina. Sacamos la masa de la nevera y con una cuchara vamos tomando pequeñas cantidades para hacer la albóndiga. Yo primero lo rebozo en la harina y luego me apaño mejor terminándolas en un vaso pequeño. 
  7. En una sartén vertemos abundante aceite y cuando esté caliente echamos las albóndigas, hasta que estén doradas.
Ya está! Ricas ricas. Se pueden hacer más pequeñas para aperitivo. Mojarlas con ali-oli, o cualquier tipo de salsa.... en fin múltiples opciones, depende de tú imaginación.


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lunes, 16 de noviembre de 2009

COSTILLAS CON PATATAS


Para escuchar mientras lees: Romeo and Juliet (Dire Straits)


Ayer fue Domingo.
Después de haber limpiado, comido... Después  de ver la película "El curioso caso de Benjamin Button", de llorar un poco, de reflexionar sobre la muerte, de pensar en nuestra vejez, después de colocar la mata salvaje de margaritas que invaden nuestro pequeño jardín, de que Gordi se sacudiera como perro sarnoso para expulsar de su jersey todos los pulgones muertos que le habían caído encima con mis carcajadas incluidas. Después de todo esto nos fuimos a dar un paseo por el pueblo.
Me hace mucha gracia esta palabra: paseo. Me recuerda a mi abuelo preguntando : ¿Nos vamos a dar un paseo? O a mi abuela respondiendo a mi pregunta ¿dónde está la tita? - dando un paseo por la calle madrid.

Fuimos al kiosco de golosinas a comprar "gasolina"( unos palitos rosas riquísimos)  para esta andadura. Alberto (gordi) elegía las callejuelas  que debíamos investigar. Calles oscuras, tranquilas, con olor a leña quemada de las chimeneas caseras. Nuevas construcciones, casas abandonadas, gatitos buscando comida entre la basura...

- Sabes? - le dije - me encanta no tener ninguna razón para pasear.
- Cómo?
- Pues eso, que no tenemos ninguna razón ni obligación ahora mismo para salir a pasear, no tenemos perro al que sacar, no hemos salido a comprar nada, por ahora no tenemos hijos,  dentro de un tiempo (eso espero) bajaremos a dar una vuelta con él o ella...Pero ahora no hay más razón que disfrutar de este paseo contigo. Eso me encanta.
- A mí me gusta tener mi razón para salir a pasear.
- ¿Cuál?
- La tuya.

Ya nos llegarán más razones para hacer ciertas cosas en nuestra vida en común. Deseamos esas razones. Mientras tanto simplemente nos toca vivir y disfrutar de lo que tenemos, que es mucho y también merece su tiempo.



COSTILLAS CON PATATAS
Dificultad: Media
Personas : 4
Tiempo: 1h aprox
 

  • 1 kg costillas adobadas ( partidas)
  • 4-5 patatas medianas
  • 1/2 pimiento verde
  • 1/2 pimiento rojo
  • 1/2 cebolla mediana
  • 1/4 vaso de Vino tinto
  • Tomate triturado para freír
  • Pimentón
  • Aceite, Sal , Agua
  • Pastilla caldo de carne

Ingrediente secreto: Aprovechar la noche para soñar y el día para cumplir los sueños.

Ingrediente esencial: Paciencia para realizar todo lo que te propongas.

  1.  Ponemos una cacerola con un poco de aceite para dorar las costillas.
  2. Mientras tanto picamos los pimientos y la cebolla.
  3. Cuando las costillas estén doradas las sacamos y reservamos en un plato. En el mismo aceite vertemos las verduras y hacemos un sofrito.
  4. Pelamos y cortamos las patatas (que hagan un clac) , reservamos
  5. Cuando la verdura esté blanda agregamos 3 o 4 cucharadas de tomate triturado y movemos. 
  6. Agregamos el vino tinto y dejamos reducir un minuto.
  7. Echamos 1 cucharada de café de pimentón dulce retirando un momento del fuego (para que no se pegue el pimentón) y mover.
  8. Agregamos, las costillas y las patatas. Mezclamos bien para que se impregnen del sofrito.
  9. Cubrir con agua. Agregar caldo de carne.
  10. Dejar cocer a fuego lento durante 30-40 min. aprox. hasta que la patata esté blanda. Probar y rectificar de sal.

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viernes, 13 de noviembre de 2009

PATATAS DE PASTOR



Para escuchar mientras lees: "Entre mis recuerdos" (Luz Casal)





Ay! Patata querida!! ¿Cuántas peleas caseras habrás causado sin querer? ¿Cuántos niños habrán llorado en la mesa porque su hermano tiene más cantidad de patatas en su plato? ¿Cuántas madres habrán dicho la frase famosa " Comete la carne, y deja las patatas que luego dices que no tienes hambre" o algo parecido?
¿Cuántas manos ladronzuelas te rodean en la fuente antes de que puedas salir de la cocina?

Pero ¿no te das cuenta de lo ansiada que eres?

Si aún te queda alguna duda, pásate por mi casa en cualquier reunión familiar, en la que haya un plato de patatas. Verás como cada uno tiene una técnica distinta para comerlas. Verás, como disimuladamente desaparecen del plato del que esté al lado de mi hermano mayor, con un movimiento ligero de muñeca. Verás como me quejo ante este descabellado robo. Verás como mi abuela hace una bandeja repleta de ellas y como por arte de magia, en unos segundos es como si nada hubiera habido en ésta...

Ay patata querida! ¡Cuánto apaño haces!



 PATATAS DE PASTOR
Dificultal: Fácil
Personas : 2
Tiempo: 1h 1 15 min. aprox.


Ingrediente esencial: Hermanos con quien pelear de vez en cuando por una patata.

Ingrediente secreto: Las puertas se abrirán si empujamos los dos con suficiente fuerza.

  • 4 patatas medianas
  • 1 cebolla
  • 1 pimiento verde italiano
  • 1 diente de ajo
  • Aceite
  • Sal
  • Chorizo de guisar
  1. Pelamos y cortamos las patatas en rodajas de 1/2 cm aproximadamente.
  2. Cortamos la cebolla y el pimiento en finos aros. Picamos diente de ajo.
  3. Ponemos todo sobre una fuente de horno (barro o cristal) bien mezclado.
  4. Salamos.
  5. Ponemos el horno a calentar a 190-200º y cuando esté caliente cubrimos la fuente con aceite ( 1 dedo y medio de altura de la fuente).
  6. Metemos la fuente en el horno. Cuando empiece a humear un poco bajamos la temperatura del horno a unos 150º.
  7. Cuando hayan pasado 40 minutos, pelamos el chorizo, y le cortamos en rodajas.
  8. Sacamos la fuente del horno. Quitamos la mayoría del aceite y escondemos bajo las patatas el chorizo para que al soltar su grasa éstas se impregnen bien
  9. Volvemos a meter al horno unos 15 min más o hasta que las patatas estén blanditas.
  10. Sacar y servir calentito 

Oye! que esto con unos huevos fritos con su puntillita y pan con buena corteza y ...¡¡Yo no digo na´!!
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sábado, 7 de noviembre de 2009

SETAS REBOZADAS

Para escuchar mientras lees : Cómplices "Cuando duermes"  



¿Por qué escribo? 


He intentado buscar la respuesta más idónea, la respuesta que resumiera tantas palabras impresas en los papeles que guardo en diversos archivadores, a tantas palabras escritas con mi puño y letra sobre diversos cuadernos, hojas de colores o simplemente servilletas de papel. Pues bien, creo que puedo dar alguna que otra razón por la que escribo.

          Quizá la primera razón es la imaginación, historias que se abonan en mi cabeza y echan raíces hasta convertirse en algo que no sé muy bien lo que es, y que si intentara explicarlo a viva voz perdería , como lo hace el zumo de naranja un minuto después de se ser exprimido, todas las propiedades. No me veo capacitada a expresar en alto lo que en mi cabeza se cocina. Por tanto creo que una de las razones más importantes por las que decido traspasarlo a un papel es esta. 

          La siguiente razón, y no por ocupar este lugar es menos importante, en este caso creo que aún es más relevante que la primera. Como dice una canción de Víctor Manuel ¿A donde irán los besos que no damos, que guardamos? Pues en este caso irían a un baúl o a una nueva caja amontonada en la buhardilla. Las palabras que dejo plasmadas son las que en muchas ocasiones no me atrevo a decir cara a cara a quién van dirigidas. Son las palabras que por la educación recibida, por mis miedos menores, o por la timidez que en ocasiones oculta mi sentimiento real, se quedarían siempre en mi cabeza. Así, si algún día alguien quisiera curiosear en lo más profundo de mi persona sólo tendría que dedicar una pizca de su tiempo a la lectura.
      
             Tengo unas cuantas  razones más, pero creo que abusaría de vuestra atención. Sólo dejarme terminar:
Escribo porque me hace volver a momentos de mi vida olvidados, me hace pensar sobre mis errores cometidos, hace que analice mis posturas a lo largo de mi vida,que me envuelva en un mundo a veces de fantasía y en la mayoría en un mundo paralelo a lo que la gente  conoce de mí.
Escribir me ausenta del ruido exterior y hace que salga mi ruido interno. 

Pero lo más importante ante todo es que lo hago por que me entusiasma, y  no sé si lo hago bien o mal, no sé si os llega a veces una milésima parte de lo que siento en el momento en el que escribo, no sé si a veces merecería que esa hoja de papel no se hubiera estropeado con mis palabras. Sólo sé que cuando lo hago sin darme cuenta he dejado un pedazo de mí en ella, y eso a veces me asombra ya que me presenta en ocasiones una parcela de "María" totalmente desconocida.
Escribo porque lo necesito, porque me desahoga, porque soy así y me gusta. Tan sencillo como eso.

María Ramos


SETAS REBOZADAS

Dificultad: Fácil
Personas . 4
Tiempo: 40 min


Las setas son un alimento con muy bajo contenido calórico, aunque en esta receta aumenta al ser fritas en aceite y por su rebozado.

Ingrediente secreto: No querer que los demás se comporten en una situación tal y como tú lo harías.


  • 1 kg de setas (girgoles o setas de cardo)
  • 2 huevos
  • Harina
  • 1/2 vaso de agua fría
  • 1/2 sobre levadura
  • Sal
  • Pimienta negra molida
  • Ajo molido
  • Perejil picado
  • Aceite para freír
  1. En un bol echamos los huevos, 1/2 vaso de agua, sal, la pimienta, el perejil y el ajo molido y batimos.
  2. A continuación echamos un poco de harina y la levadura. Iremos añadiendo harina hasta que nos quede una mezcla líquida pero consistente.
  3. Dejamos reposar en la nevera unos diez minutos.
  4. Mientras tanto lavamos las setas y escurrimos bien. Si queréis podéis dejarlas después en un paño de cocina para que absorba el exceso de agua.
  5. Ponemos en una sartén el aceite a calentar.
  6. Sacamos la mezcla anterior de la nevera. Echamos un pellizco de sal a las setas.
  7. Rebozamos las setas, impregnándolas bien por todas partes pero sin empapar en exceso.
  8. Freímos. Retiramos del aceite y las dejamos sobre papel absorbente para retirar el aceite sobrante.
  9. Y ya está! Yo suelo freír a parte unas tiras de pimiento, y para acompañar pongo un poquito de salsa ali-oli. Exquisitas!



viernes, 6 de noviembre de 2009

REVUELTO DE CHAMPIÑONES CON JAMÓN


Para escuchar mientras lees Take my hand (Dido)




Pongo mis ojos a la vista de quien quiera indagar dentro de mí.

En ellos, se puede ver cuál es el sentimiento que se apodera de mi ser en ese preciso instante. También se refleja la lucha entre lo que sucede y lo que quiero demostrar. Pueden entrar en ellos y darse cuenta de que algo está fallando y que no son los mismos que hace un tiempo. Mi mirada cambia tal y como cambia mi vida, mi ánimo, o mi forma de ver lo que se pone delante de mis ojos.

La edad se plasma en las arrugas que abrazan el contorno de mis pestañas, y la experiencia se plasma en las pupilas dilatadas tapando el color del iris. La vida pasa por delante, los buenos momentos se expiran dejando, cual olas , resquicios de lo más profundo para demostrar que han estado ahí aunque hayan sido breves. El dolor atenúa el peso de los párpados y caen hacía los laterales como cortinas de teatro al acabar una función.

Pongo mis ojos a la vista. No tengo como esconderme.

Mi coraza se desarma en el cara a cara. Mi armadura se desmonta en una simple mirada, y no tengo técnica ni escudo con el que protegerme. Tal debilidad me incómoda. Me hace frágil ante otros ojos. Aunque a veces tengo suerte, y mi "enemigo" no entiende más que las palabras que salen de mi boca. He vencido. No he luchado.

Simplemente "mi enemigo" no ha aprendido a indagar el escaparate de mi alma: .   ((Escrito por María Ramos 28/10/08)





Dificultad: Fácil
Tiempo: 1/2 hora aprox.
Personas : 2

  • 400 gr champiñones
  • 2 dientes de ajo
  • 100gr taquitos jamón serrano
  • 2 huevos
  • Perejil
  • Sal
  • Pimienta
  •  Aceite
    Ingrediente secreto: Nostalgia para seguir sintiendo.

    1. Lavamos los champiñones y laminamos. Pelamos y picamos los dientes de ajo.
    2. En una sartén con un chorrito de aceite echamos el ajo y a continuación los champiñones. Dejamos que reduzca el agua que sueltan.
    3. Añadimos los taquitos de jamón, la pimienta negra molida y perejil picado.
    4. Movemos y añadimos los dos huevos sin batir.
    5. Probamos de sal y rectificamos.
    6. Hay personas a las que el huevo les gusta menos  hecho, a mi me gusta que quede pegado al champiñón pero que esté bien cocinado.
    7. Voalá! Ya está preparado, listo y fuera! Acompáñalo con unas tostas y ya me contarás.






martes, 3 de noviembre de 2009

TORTILLA DE PATATA EN SALSA (Abuela Josefina)


Para escuchar mientras lees. La Felicidad (Soledad Jimenez)


El viernes pasado fui a comer a casa de mi abuela en Getafe , ya que Álvaro nos tenía que recoger para llevarnos a Recas. Cuando se acercaba la hora , nos bajamos mi tita , mi abuela y yo a las escaleras de su portal a esperarle. Entonces mi abuela empezó a mover los labios sin pronunciar palabra alguna.

- ¿Qué rezas? - pregunté
- No estoy rezando, es que me he acordado de una poesía.
- Recítala - saqué el móvil, puse la grabadora y aquí la escribo tal y como ella me la contó.

" Como personas mayores decían ciertos muchachos, si nos dieran a escoger el porvenir que "amilamos" (anhelamos) : yo quisiera ser marqués, yo cura, yo boticario, yo general, yo ministro, yo médico, yo abogado. Pues yo tan solo deseo, pronunció el niño más guapo, que mis padrecitos vivan por lo menos tantos años como viva yo en el mundo.
- ¿Para qué? - le preguntaron - si estarán tan "azacochos" que no podrán dar ni un paso.
- Precisamente los quiero para llevarlos del brazo, pa´darlos mi dulce apoyo , mi pan y mi amparo. Por que ellos conmigo hicieron siendo pequeño otro tanto y he de pagarlos la deuda para no ser un ingrato.

¿Qué, te ha gustao? - Me preguntó con un tono muy requeño. Y entonces no pude parar de reír.

Me gustó, como me gusta su presencia,  su voz, y  todo lo que sabe hacer.  Me gustó por que son pequeños instantes que se hacen gigantes por los sentimientos que nos unen.

Ya os hablaré de mi abuela en otro momento más detenidamente. Ahora os dejo la receta que me hizo ese día para comer. La foto es del plato que ella me preparó. Y lo que a continuación pongo es tal y como ella me dictó la receta.
Aunque yo me la sé, y podría dar unas explicaciones más exactas de como elaborarla, me apetecía escribirla tal y como ella me dijo.

Espero que os guste.


Mi abuela Josefina




TORTILLA DE PATATAS EN SALSA 
(Abuela Josefina)

Ingrediente esencial: Al que ofrece ingratitud , deberían regalarle soledad

Ingrediente secreto: Errores subsanados hace años se convierten en la tranquilidad del día a día.

Receta dictada por ella:

Tortilla de patatas - ¿cómo? pregunté. Pues con patatas y huevos fue su respuesta. Recién hecha o del día anterior.
A ver para la salsa: En un poquito aceite (caliente) vamos a poner 1/2 cucharada de harina y como una cucharadita de café de pimentón. Agua a medida, al gusto. Dos dientes de ajo picados. Vamos a poner 1 ramita perejil picada también y dos hojas de laurel. Y si se quiere echar 2 bolitas de pimienta negra machacá también le da buen sabor. Sal.
Cocer, y cuando cueza echar la tortilla ( en trozos) y que dé un hervor.
Pero ¿cuánto tiempo? pregunté. Pues como 5 ó 10 minutos u 8 minutos, lo que quieras- respondió.
Y a servir. ¿Vale ya?
Si abuela vale.

Esto es lo maravilloso de las personas que han aprendido a cocinar sin libro de receta alguno, simplemente con el saber hacer de su madre, hermanas y época. Todo a ojo, sin medidas precisas pero con un sabor espléndido. Ay! lo que nos queda por aprender.

 

Dedicado a mi madre y a mi abuela, por todo lo que me han dado y enseñado. Dedicado a mi Gordito por apoyarme en todo con lo que me ilusiono y ser tan agradecido con cada receta que hago. Os quiero

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